Para alguien a quien el tiempo no supone ninguna amenaza, resulta difícil comprender la utilidad de un medio como éste. Espero que a quienes les pueda interesar les cubra las expectativas de saber algo sobre mí que soy, en ocasiones, incapaz de soltar frente a frente, quizás arrastrado por la presión del espacio vital invadido del otro, o tal vez movido por las compartimentadas estructuras sociales, convencionales en sus formas y vacuas en su fondo.
Necesito de esta especie de acantilado inconmensurable donde poder arrojar todos mis demonios, aficiones, sueños, fantasmas, anhelos, pesadillas, proyectos,... Es algo que un grupo de gente hacíamos hace 3 lustros mediante el correo ordinario, algo que me servía en gran medida para mirar con otros ojos el Mundo Real Trade Mark, algo abandonado entre el estrés del día a día.
Por eso, hoy que inicio esta andadura como un ser renacido -cambio de nombre incluido y todo- tengo que saludar a mis antiguos vástagos (Lapislázuli, Godiva, Lagash, Grenouille y Las Súcubas) y lanzarme, como en una huida hacia delante, hacia el abismo de este medio desconocido y esperanzador.
1 comentario:
Salamandra de Diamantes te manda un saludo efusivo desde su rincón permanente, donde anida desde siempre. No me moveré demasiado para no desprendenderme de ninguna de las joyas que me envuelven, mas conseguiré estar al tanto de tus vaivenes.
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